dissabte, 13 de desembre del 2008

Ya que no puedo estar en Menorca por problemas espacio-temporales os envío las dos únicas tonterías que mis decrépitas neuronas han sido capaces de crear. Decir, que la más larga es algo confusa y no me ha dado tiempo a acabarla. De la corta no hay excusa posible, soy absolutamente responsable. Es lo que hay. Petonets a tothom.

PD Poniendome en lo peor, pero lo más posible, enhorabuena al Barca.

Vagos Recuerdos

Mis párpados se abren como una puerta vertical y la luz entra en mi mente, las imágenes empiezan a recobrar la lógica habitual, es decir la monotonía habitual, veo el techo blanco, las sábanas blancas y el pie metálico también blanco de una cama de hospital, un día tras otro sin que cambie ni tan siquiera la luz también blanca, también aséptica y otra vez este trabajo árduo que empieza cada mañana. Tengo una extraña enfermedad, según parece, según creo, solamente yo, pues nadie me dice nada, viene gente y les hablo pero nadie me habla, me lavan, me pinchan, pero nadie se intenta comunicar conmigo. Y empiezo la tarea de reconstruir poco a poco mi vida, cada día. Empiezo por intentar recordar a mis padres, unos días cuesta menos, algunos días recuerdo detalles recordados el día anterior, aunque pocos la verdad. Ayer mi madre era enfermera, así que así la recuerdo poco a poco hoy, pero el traje blanco de enfermera hoy lo recuerdo con una tonalidad distinta, más bien el amarillo claro de una camarera de bar, sí, lo veo claro ahora, una camarera con su jarra de café y su delantal blanco. Mi padre aparece en escena con un traje oscuro y la besa. De pronto me doy cuenta de que no es mi padre. Pero ayer lo parecía, o lo creía, pero no es mi padre quien la besa con pasión, mientras yo les espío con mi hermano a través de la ventana y lo recuerdo todo de pronto. Aquel día llegamos pronto del colegio porque habían matado a alguien importante, a quien tampoco consigo recordar. Ellos no se lo esperaban, así que con nueve años descubrí que todo es mentira. De mi madre salto a mi hermano y recuerdo como se tomo aquello, era muy tímido y sensible, aquello le afectó. Aparece mi verdadero padre esta vez, o quizás no, quien puede saberlo. Vuelve del trabajo pronto y está vez es él quien descubre la verdad, es decir, la mentira. Y salto de pronto a la universidad sin saber cómo ni por qué, ni siquiera qué estudio. Me veo en una cafetería inmensa comiendo solo en una esquina, rodeado de gente que no me habla, como en el hospital. De pronto soy consciente de que nadie se ha molestado en hablarme nunca. Yo les veo pero ellos no perciben mi existencia. El esfuerzo de recordar es inmenso así que caigo rendido y me duermo. Despierto en una cama de hospital, las enfermeras solícitas me desvisten para lavarme. Pero son discretas y no hablan conmigo. El techo es de un blanco inmaculado, casi perfecto, absoluto. A la cabeza me vienen recuerdos vagos de una vida que deduzco que es la mía, aunque la recuerdo como una vieja película vista en la infancia. Recuerdo un jardín y a mi jugando con mi hermano. Recuerdo volver pronto del colegio y ver a mi madre abrazando a su hermano, al parecer había muerto alguien importante. Y veo a mi padre en una cafetería inmensa el día que me llevó por primera vez a la Universidad, está llena de gente, pero no conozco a nadie, no hablo con nadie. Entra una enfermera y mete algo en la sonda, de pronto un sueño inmenso me invade…me despierto en una cama grande de hospital……..Me despierto en una habitación de hostal, no recuerdo nada, durante un segundo no sé dónde estoy ni quien soy, tengo vagos recuerdos de lo que creo haber soñado, recuerdo un hospital y a tí vestida de enfermera besando a un tipo de traje oscuro, de pronto lo recuerdo, es tu hermano, ¡dios! de pronto lo recuerdo todo, recuerdo que te fuiste con mi hermano, recuerdo que me echaste de casa, recuerdo que estoy arruinado, recuerdo que estoy desesperado, recuerdo por fin que las pastillas del frasco vacío están en mi estomago y según me vuelvo a quedar dormido os oigo gritar mi nombre al otro lado de la puerta…me despierto en una cama de hospital, con la mente en blanco.

Ramiro B. Romero
En la Real Villa de Mocejón a fecha indeterminada del mes de Noviembre del año del señor de 2008


Pausa para comentar e ir al baño a hacer cada uno lo que crea conveniente, recargar cerveza, suicidarse en masa, etc.

No hay que agobiarse

Me despierto y no soy yo, soy tú, pero si me despierto y soy tú, entonces eres tú quien se despierta sin ser tú, siendo yo; así que me despierto y soy yo. Bien, ahora que está toda aclarado me doy la vuelta y me vuelvo a dormir.

1 comentari:

  1. Bueno Ramiro, no hemos entendido nada, lo del suicidio en masa sí, pásanos el frasco.

    Tontorrón, que nos ha gustado...lo hemos entendido todo, todos (los cinco que hemos asistido al acto). Estamos conmocionados, en estado de xoc...
    Debes estar muy mal en Toledo, estamos muy preocupados por ti, no porque lo hayas hecho mal.

    Vuelve pronto, te queremos...tuyos siempre

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